Dos notas sobre la crisis del humanismo en Bolivia
Palabras clave:
Educación, Bolivia, PositivismoResumen
La orientación principal a que responde la educación pública en Bolivia no puede ser definida por su sentido afirmativo y por una idea clara de los fines que ella persigue sino, únicamente, por lo que menosprecia, por su repulsión a ciertos valores y a ciertas esferas del conocimiento. Estas esferas son las que corresponden a la literatura, a la historia, a la filosofía, a las artes, a la religión, esto es, a lo que comúnmente se designa como "conocimientos humanísticos". Seguramente por efecto de una antigua influencia positivista, la mentalidad boliviana, en general, y no sólo la que predomina en los diversos niveles educativos, se muestra inclinada, de un modo indiscutible, a un mezquino practicismo, a la búsqueda del lado utilitario de la vida. Se diría que entre nosotros prevalece una visión unilateral de las realidades humanas, una suerte de exclusivismo según el cual las únicas formas valiosas de la cultura serían las que se manifiestan en cifras, en aplicaciones prácticas, en réditos económicos, en apreciaciones cuantitativas y materiales.